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  • Ahora veamos justamente esa Buenos Aires viva, animal y vegetal que podemos observar, si prestamos atención, en cada vereda, en los balcones, en las plazas e incluso en los descampados.

    Podemos dividir a esos otros habitantes de Buenos Aires en tres grandes grupos: los animales salvajes, los animales de compañía o mascotas, y los vegetales.

    Hoy nos vamos a ocupar de este último grupo, que a su vez vamos a dividir en cuatro grupos: la vegetación originaria, vegetación ruderal y el arbolado urbano.

    Ya vimos aquí cual es la vegetación que ya existía aquí antes de que fueran introducidas las especies invasoras, así que vamos a por la vegetación ruderal.

    Vegetación ruderal

    baldío de Buenos Aires

    Se le llama ruderal a la vegetación que crece en los llamados ambientes antropizados, o sea los lugares “abandonados”, por decirlo de algún modo. Los bordes de los caminos, el costado de la vía del tren, terrenos baldíos, terrenos rellenados, etc.

    Por lo general allí crecen plantas que no pueden hacerlo en otros lados, como por ejemplo una plaza, ya que suelen ser arrancadas por los cuidadores, o son avasalladas por las otras plantas más ornamentales. Suelen ser hierbas anuales, o sea que sólo viven una temporada. Crecen rápido, producen muchas semillas y viven poco. Así es que en una temporada pueden producir varias generaciones, en ciertos casos.

    Pastizales de pata de perdiz Las más comunes son el árbol del cielo (Ailanthus altissima) o la siete venas (Plantago lanceolata), que crecen en lugares donde otras plantas no podrían por la abundancia de escombros por ejemplo o de nitrógeno, pero los ecosistemas se componen de diversos seres vivos que pueden cubrir diferentes nichos, y así es que hay plantas para crecer incluso entre los escombros, o en los peores terrenos como el borde de la vía.

    Otro común es el ricino (Ricinus communis), más fácil de ver en terrenos con algo más de tierra, como en bordes de caminos y baldíos. Acompañada por lo general por los Pastizales de pata de perdiz (Cynodon dactylon), un pasto exótico originario del norte de África, pero que crece como plaga en lugares húmedos. Podemos ver pastizales grandes en la Costanera Sur, el más grande está junto a la Laguna de los Macáes .

    Otras que se verán siempre en estos terrenos descuidados son el diente de león, la achicoria, el berbasco, la borraja y la yerba meona.

    Arbolado Urbano

    Los árboles de Buenos Aires son una de las partes más importantes del ecosistema urbano porteño, ya que no sólo son decorativos, sino que aportan oxígeno y son el hogar de muchas otras especies, otros habitantes animales y vegetales de la ciudad.

    Suelen ser los más notorios, al contrario de lo que sucede con la vegetación ruderal, es difícil no darse cuenta que hay un árbol en la vereda.

    No cualquier árbol crece y puede crecer en Buenos Aires, y aquí ya no se debe a si el suelo es propicio o no, sino que es ya una decisión humana. Los encargados de la ornamentación de la ciudad son quienes eligen qué árbol va y cuál no. Se eligen según si son ornamentales, si viven mucho, si no son difíciles de podar, su resistencia a las plagas y enfermedades, si tienen raíces que pueden levantar las veredas.

    Los árboles más antiguos son los que vienen desde tiempos coloniales, que por lo general son de origen europeo. Luego se fueron sumando de diferentes partes del mundo, otras regiones de nuestro país inclusive.

    Como vimos los únicos árboles que crecían por esta zona eran algarrobos, y se sabe que uno de los paseos ornamentados más antiguos era la llamada Alameda, no porque estuviese flanqueada por álamos, sino por la costumbre de llamar así a ese tipo de paseos, ya que eran ombúes autóctonos los que adornaban el paseo frente al río.

    Se cree que para 1890 había unos 1100 árboles en la ciudad, todos plantados por los vecinos. Pero al año siguiente llegó el arquitecto francés Carlos Thays, quien redecoraría casi todas las plazas de la ciudad, y sus calles también. Plantó más de 20 mil árboles de todo tipo y origen, pero las más populares fueron el arce, fresno, paraíso, plátano, acacias, tipas, sófora y jacarandá. Hoy hay más de 500 mil árboles en la ciudad.

    En la foto que sigue pueden ver los jacarandaes en flor violeta a la izquierda, y las tipas a la derecha, el árbol más típico de esa zona que suelen ser de tronco grueso y arrugado, y hojas pequeñitas y bien verdes.

    Avenida Santa Fé

    fuente sustentator